Como docente jubilada quise abandonar lo técnico e incursionar en la literatura. De la mano de José T. Angola en la Escuela de Escritores entendí que nada de lo que había hecho servía para esta nueva aventura. No puedo olvidar las frases: …lo dices todo, asfixias al lector, tienes que hablar desde las emociones, tienes que dejar que el lector participe, invente, imagine, … !Qué difícil reto! Trabajé duro en aquello y transformé todos mis textos. Volví a ECREA y esta vez de la mano de Mario Morenza hice nuevas correcciones pero de forma, porque ya hablaba con más corazón. Hoy mi libro “Ya esto no es un juego” está inscrito en el tercer concurso literario de autores independientes (kdp.amazon), y siento que independientemente de lo que pase, ya gané.